¿Tres razones por las que la Tatarica es la top de entre las top?
- Por su fácil mantenimiento. Mejor dicho, por su nulo mantenimiento. Contar con flores secas y preservadas en casa cuenta con la enorme ventaja de poder olvidarse de ellas una vez las has ubicado en su lugar. Alejarlas del sol directo, de la humedad y retirarles el polvo, es lo máximo que tendrás que hacer por ellas. ¡Ojalá todo fuese así de fácil!
- Por su volumen. La Tatarica es uno de esos ramos resultones que dan, desde el principio, mucho más de lo que pensábamos. ¿Alguien echa de menos más cosas con esa virtud? Una vez te llegue a casa tu ramo, simplemente tendrás que desempaquetarlo y, con cuidado pero sin miedo, separar sus ramitas para hacerlo más frondoso, ¡verás qué cambio! Siendo de los ramos más cortitos que hay, completo mide unos xxxx cms, es increíble los resultados que da. Cierto es que por el tamaño de su tallo pensemos que no es parta para cualquier jarrón pero no la infravalores, va a darte mucho juego y, te aseguramos, que el jarrón será lo de menos ¡ya encontrarás el perfecto!
- Por su color. Colores estridentes como el fucsia para los más atrevidos. Demuestra ese toque de locura, valiente y original con una tatarica fucsia que, palabrita, va a ser objeto de todas las miradas.
Verde para los tradicionales y que no quieren arriesgar demasiado pero, ojo, no menos llamativa por ello. Buscar un ramo diferente sin salirse de la estética de los tonos florales por excelencia es posible con esta opción. ¡Simple a la par que vistoso!
El precioso ocre… Un color diferente, potente, pero que es capaz de encajar con los estilos más cálidos y sobrios de una estancia. Llamativo sin resultar extravagante, esta última incorporación a nuestra tienda va a hacer las delicias de más de uno…
No queremos convencerte pero, si has leído hasta aquí, seguramente ya lo habrás hecho tu solo. Nosotras no tenemos más que confirmar que la tatarica es el ramo perfecto, fuera o no tu primera opción. Si ahora nos preguntas por el jarrón perfecto para este ramo, siempre te aconsejaremos uno no demasiado alto 8hasta 25 cm) y de boca ancha para poder encajarlo sin problemas. Si te atreves, puedes cortar sus tallos y colocarlo en un jarrón tipo “ensaladera” o bombonera, de esta forma conseguirás un efecto totalmente diferente.
Y ahora qué, ¿ya lo tienes claro?
